El bloguero gruñón en Tanzania

Hola amigos. Aquí estoy de nuevo preparado para sufrir las vicisitudes que este grupo de viajeros me prepara todos los años. Espero que lo hayan organizado todo bien y no me estresen demasiado. Aunque a primera vista os pueda parecer un poco desagradable, cuido de que el viaje no se desmadre y ya antes de empezar pongo críticas a los planes a veces desmesurados del equipo.

Ya os iré contando

El bloguero gruñon

Esto de viajear por el mundo está muy bien pero no es oro todo lo que reluce.

Dia 1

Menuda paliza de avión que me han dado estos cuatro inconscientes. 27 horas de avión en avión y de salas de espera en salas de espera. Además hay que aguantar a los tordos de los escáneres. No te joroba que nos han quitado la cinta de cello ancho que teníamos por si se rompia el parabrisas del coche. La excusa que han puesto ni te la puedes creer, es por si atábamos las manos a alguien con ella. Ni me lo podía creer.

Dia 2

Despues del palizón del vuelo a mi pobre Alter Luismi solo le ha dejado dormir dos horas y acto seguido, ¡ale! A pasear. A pasear 12 kilometros ida y vuelta hasta el pueblo. Se ha puesto a llover  y como aquí desconocen el asfalto pues eso a disfrutar del barro.

Dia 3

Llueve, llueve, llueve. Menos mal que lo hace solo por la noche. Pobre gente. Todas las calles sin asfaltar. Para conseguir llegar hasta el todoterreno, el taxi ha pasado las de Caín. El pobre hombre no sabia que cobrarnos. Estos le han dado lo que les ha parecido bien. Al final hemos tenido que bajar del coche y seguir andando detrás del taxista que se empeñó en llevar las maletas el solito.

Tres niñas jugando delante de su casa

Día 4

Pobre todoterreno; dando botes durante no sé cuántos kilómetros. No sé si aguantará sin desguazarse hasta el final y no te digo el culo sobre todo de los que van atrás. Parece que lo asientos son de madera. ¡ Como les gustará tanto los bichos a estos cuatro tíos.

Día 5

Hoy hemos atravesado el sitio ese donde hay tantos bichos, el serengeti o algo. Todo bien hasta la vuelta en la que no sabían cómo regresar. Ha empezado a llover y el vehículo se deslizaba más que rodaba. Menudo infierno. Menos mal que se ha impuesto la cordura y el segundo ha orientado el coche hasta la ruta correcta; eso sí, en medio de un mar de barro. Hay que reconocer que el piloto es un as del todoterreno.

Día 6

Hay que ver!. La única carretera por llamarla de alguna manera es de barro y tan estrecha que solo cabe el todoterreno. Aun así esta gente jura y perjura que suben y bajan camiones en las dos direcciones y hasta hay un turismo aparcado en la ciudad que me aseguran que circula sin estropearse por esa pista infernal. Ojalá no llueva porque si no, de aquí no salimos.

Día 7

Lo sabía!! Había otra carretera y el Garmin nos ha engañado. A la vuelta hemos regresado por la buena. Bueno de buena es un decir pero por lo menos es infernal.

Día 8

Al lío. A reparar el depósito

Hay un charco debajo del coche. Será agua? No!!!El coche gotea diésel. El depósito se ha roto con la pista esa del demonio. Menos mal que estamos en el lugar y momento indicado y nuestros guías a los que también se les ha roto la batería de su coche ( si es que aquí es muy fácil que se rompan las cosas  leñe!!) nos lleva a un taller cuyo mecánico es un doctor en su oficio. Al menos un coche averiado por hora en la carretera.

Día 9

Hoy toca atravesar Tanzania de norte a sur. Muy bonito. Solo que han sido 13 horas de conducción más paradas. Al final hemos llegado al hotel de noche porque nos hemos fiado más del maps.me que del Garmin y daba las coordenadas equivocadas.

Día 10

Otro día de palizón por carretera con autobuseros locos y multa incluida.

Día 13

Dar es Salaam. Menudo caos. Casi me da un infarto. Creí que o bien atropellábamos a alguien que llevaba un saco en la cabeza o embestíamos a un tuc tuc.

Y el tiempo, siempre te dicen que tardas tres horas y tardas cinco. Pero ya les hemos calao. Hay que salir dos horas antes para llegar a la hora que quieres llegar realmente.

Esta ciudad parece que la han desmontado. Todo está como roto y sucio. Hasta las aceras, cuando las hay, tienen todos los adoquines sueltos. Pero bueno, si hay que visitarla se visita.

Bueno, la comida es muy barata y está muy rica. No todo va a ser gruñir.

 Nuestro barrio

Día 15

Esto es muy bonito pero entre que no ha parado de llover en toda la noche, los cuervos y el señor ese que canta desde el minarete no se duerme un pimiento. Habrá que llevar las katiuskas para pasear.

Stone Town es una ciudad patrimonio de la humanidad. Eso me demuestra que la UNESCO pasa bastante de sus patrimonios.

Pinchazo

Ha llovido toda la mañana pero como de eso no tiene la culpa nadie  no hay nada que decir. Tampoco tiene la culpa nadie de que al dala dala se le haya pinchado una rueda y que nos hayan traído en una camioneta como un saco de carbón. 

Esa afición a los transportes públicos nos va a matar. Por supuesto, con la lluvia, las calles se han transformado en un barrizal. Haber mañana si hay más suerte con el tiempo.

Día 16

Programa para hoy:

Lluvia torrencial durante toda la noche.

5,45 de la mañana.A las seis menos cuarto llamada a la oración a cargo del muecín vecino.

6,15. Lucha de gatos en el jardín con maullidos de ataque en toda regla.

6,30 graznido de cuervos estilo Zamzibar a cargo de la bandada local.

6,30 Desayuno y fin de fiesta.